El martes fui con Norman, el gringo músico de la UG que vuela (¿o volaba?) parapente, a las montañas que están por detrás de La Bufa, hacia la mina del Cubo y la comunidad de La Rosa, El Nayal, etc.
Me había pedido que lo acompañara para buscar un despegue con orientación este para la época de lluvias, caminamos durante varias horas en esas montañas enigmáticas, conocimos lugares muy bonitos, platicamos y hubo también algunos acontecimientos raros, como suele pasar cuando uno deambula en las montañas cuevanenses.
Justo me contaba que la señal que tuvo para regresar a México fue una mariposa monarca cuando apareció repentinamente una de ellas revoloteando a nuestro alrededor por un buen rato. Después hubo una formación de nubes muy extraña por encima de nuestras cabezas, estábamos prácticamente en la base de la nube, en la punta de una loma alta de la zona. A ambos nos parecían muy extrañas las formaciones tipo onda de las nubes altas, típicas de la entrada de frentes fríos.
El paseo terminó, le mostré el simulador de planeadores en el ipad y le presté un libro que había estado esperando por él justamente: Las enseñanzas de Don Juan en inglés. Lo conseguí hace tiempo en $10 en una feria del libro de las que tantas hay en Guanajuato.
Me comentó que el miércoles (ayer) iba a ir a volar al Cubilete con Juan José, un nuevo piloto de Irapuato. Le dije que tal vez yo los acompañaba, pero no pude ir. Sin embargo Ernesto, el que me compró el paramotor, sí fue con ellos. No conocía a Norman pero sí a Juan José del reciente evento en El Salto. Yo pensé que no habían ido porque ya no me avisaron nada, pero en la tarde me habló Ernesto para avisarme que Norman había tenido un accidente y lo habían trasladado en helicóptero al hospital Aranda de la Parra en León.
Ahorita está en cirugía, se lastimó bastante algunas vértebras, en 5 días lo vuelven a operar. Esperemos que todo salga bien, de nuevo las tragedias y coincidencias macabras de vuelo. Creo que desde que lo llevé a las colinitas de Los Infantes, cuando apenas estaba aprendiendo a volar, no compartía mucho tiempo con Norman, y justo un día antes de su accidente... coincidencias muy extrañas siempre.
Tampoco voy nunca a visitar a nadie al Aranda de la Parra, y ayer también estaba ahí internada mi tía Eva de Valle de Santiago, la operaron porque se cayó y se fracturó la cadera. Aproveché el viaje para visita doble, también más tarde yo creo que regresaré a visitar a Norman, es posible que vaya Mario... la banda de voladores de León también fue... dice Mafer que nuestras reuniones son en hospitales, velorios y demás... es cierto, una bola de enfermos.
Coincidencias y más coincidencias todo el tiempo, leo sobre jaguares y aparecen en la televisión programas de jaguares, guiños del espíritu tal vez, ¿pero a qué me lleva todo eso? Es casi como interpretar los sueños, o peor aún...
jueves, 31 de octubre de 2013
lunes, 28 de octubre de 2013
Sofía y su doble
Hablando de dobles, hace poco ocurrió algo un tanto simpático. Yo andaba de viaje en un evento de vuelo para variar, Sofía se quedó con mis papás en León y Mafer dormía sola en la casa. Era domingo y ella suele despertar lo más tarde posible, ya que es el único día que puede hacerlo.
Desde temprano empezó a escuchar que Sofía corría por la casa persiguiendo al gato, y entre sueños la regañaba para que se estuviera quieta. Ella le pidió algo de desayunar y ya cuando estaba comenzando incluso a preparar la comida, recordó que Sofía no estaba en Guanajuato, sino en León con sus abuelos. La buscó por todos lados pero obviamente nunca apareció, lo único que había de rastro eran los juguetes que estaban acomodados en su recámara como si hubiera estado jugando con ellos, y los excrementos del gato (que se zurró del susto tal vez =)
Luego, al comentarles del accidente curioso a mis papás, ellos mencionaron que justo a la hora en que ocurrió el percance, a Sofía no la escucharon en la casa, aunque ya se había despertado. Y más tarde, al preguntarle Mafer sobre los juguetes, le dijo que había estado jugando con ellos poco antes, y hasta pareció sorprenderse cuando le recordó que había estado desde el viernes con los abuelos.
En fin, que este suceso se suscitó... y punto; bueno bye.
Desde temprano empezó a escuchar que Sofía corría por la casa persiguiendo al gato, y entre sueños la regañaba para que se estuviera quieta. Ella le pidió algo de desayunar y ya cuando estaba comenzando incluso a preparar la comida, recordó que Sofía no estaba en Guanajuato, sino en León con sus abuelos. La buscó por todos lados pero obviamente nunca apareció, lo único que había de rastro eran los juguetes que estaban acomodados en su recámara como si hubiera estado jugando con ellos, y los excrementos del gato (que se zurró del susto tal vez =)
Luego, al comentarles del accidente curioso a mis papás, ellos mencionaron que justo a la hora en que ocurrió el percance, a Sofía no la escucharon en la casa, aunque ya se había despertado. Y más tarde, al preguntarle Mafer sobre los juguetes, le dijo que había estado jugando con ellos poco antes, y hasta pareció sorprenderse cuando le recordó que había estado desde el viernes con los abuelos.
En fin, que este suceso se suscitó... y punto; bueno bye.
El Ojo
Desde siempre he visto, en ocasiones, al cerrar los ojos para dormirme, una especie de ojo luminoso.
Algunos dicen que es el reflejo de nuestros mismos ojos, otros se lo explican con fenómenos de luz y demás, pero lo que ese ojo está haciendo últimamente no creo que me lo puedan aclarar en términos racionales.
El ojo ha comenzado a parpadear, a moverse de posición, a rellenar el espacio oscuro con una luz amarillenta muy intensa... y de pronto, cuando siento que "lo cruzo", como si atravesara esa barrera luminosa, de repente se apaga su brillo y no puedo lograr que se encienda de nuevo.
La tonalidad en que se detiene es como un gris verdoso o azulado, pero al ir cruzando la luminosidad pareciera tener una textura granulada.
Desconozco a ciencia cierta de qué pueda tratarse el fenómeno, la verdad no me resulta para nada desagradable, pero es una de esas tantas cosas que parece no llevar a ningún lado, uno más de los guiños indescifrables (al menos para mí) con que nos topamos en la vida.
Algunos dicen que es el reflejo de nuestros mismos ojos, otros se lo explican con fenómenos de luz y demás, pero lo que ese ojo está haciendo últimamente no creo que me lo puedan aclarar en términos racionales.
El ojo ha comenzado a parpadear, a moverse de posición, a rellenar el espacio oscuro con una luz amarillenta muy intensa... y de pronto, cuando siento que "lo cruzo", como si atravesara esa barrera luminosa, de repente se apaga su brillo y no puedo lograr que se encienda de nuevo.
La tonalidad en que se detiene es como un gris verdoso o azulado, pero al ir cruzando la luminosidad pareciera tener una textura granulada.
Desconozco a ciencia cierta de qué pueda tratarse el fenómeno, la verdad no me resulta para nada desagradable, pero es una de esas tantas cosas que parece no llevar a ningún lado, uno más de los guiños indescifrables (al menos para mí) con que nos topamos en la vida.
El Cerro del Sombrero y La Bufa
No sé si podría decir que desperté, o aparecí repentinamente, en la punta del Cerro del Sombrero. No caminaba sobre el cerro, más bien flotaba, como surfeando las crestas rocosas del pequeño montículo al lado de la presa La Purísima. Alcanzaba a percibir el reflejo de la luna sobre el agua del embalse, trataba de ver mis manos en el "sueño", pero resultó muy fugaz la visión de mis propias manos, rápidamente se convirtieron en alas negras y brillantes. Cuando grazné con fuerza me di cuenta de que yo era un cuervo, e intentaba escapar de algo así como un gigante que me atrapaba, cuyo rostro se acercaba al mío y después se desvanecía.
Me dirigí hacia una cueva en La Bufa, al parecer yo vivía ahí, o al menos me refugiaba temporalmente. Todo mundo relaciona al Cerro del Sombrero con El Cubilete por la leyenda que cuenta que de ahí se columpiaba el diablo entre ambas montañas; pero en realidad la conexión que hay entre el Cerro del Sombrero y La Bufa es mucho más profunda, son montañas de frecuencias similares, sitios de poder, vamos. Si bien al famoso Cubilete nadie le niega su poder, éste ya se encuentra tan gastado y manoseado que no vale la pena siquiera pensar en él.
Pero en fin, la cuestión importante no son los cerros... tampoco los cuervos o los sueños. Nada es en realidad lo suficientemente notorio como para resaltar. La bruma que cubre las montañas abarca hasta donde alcanza la vista, y en algún momento del viaje regreso a ser yo, acostado en mi cama, temeroso de las sombras nocturnas.
Al día siguiente emprendo una caminata hacia La Bufa y reconozco todo lo que vi con anterioridad desde el aire... las formaciones rocosas, las cuevas, los grabados y la maleza. No era necesaria la confirmación, yo sabía con exactitud lo que estaba ocurriendo. En una de las cuevas el fuego aún ardía y el humo seguía brotando como en un volcán.
lunes, 21 de octubre de 2013
El doble
La cuestión del doble en la literatura es muy común, empezando por el libro de Dostoyevski, El Doble, o con Herman Hesse y su Lobo Estepario que nos lleva después hacia la multiplicidad de yoes al estilo Pessoa... y por supuesto Carlos Castaneda y las enseñanzas de don Juan y don Genaro, donde los más grandes prodigios de la brujería se ejecutan precisamente por ese doble, una especie de piloto oculto en nuestro interior que, cuando nosotros, el copiloto, la caga muy feo, sale al quite y nos libra del peligro.
He vivido esto en carne propia ya en varias ocasiones, con el helizazo y tantos otros percances de vuelo, pero también fuera del ambiente de vuelo (o no tanto) como con el cuate de San Pancho.
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lunes, 14 de octubre de 2013
Parar el mundo
He estado repasando de manera más estructurada los libros de Carlos Castaneda en los últimos meses, a raíz de una conversación que tuve con Hans, mi instructor de planeadores, en la huasteca potosina.
Parar el mundo, según los testimonios de Castaneda, consiste básicamente en detener el diálogo interno, esa eterna vocecita con quien platicamos sin cesar y que, según las enseñanzas de Don Juan, nos ayuda a reforzar el mundo en que vivimos y creemos real. Si no logramos parar esa voz, resulta imposible acceder a lo que llaman segunda atención, nagual, segundo anillo de poder, etc.
Esa vocecilla siempre me ha obsesionado, a ella se debe incluso el título de este blog... El Yo Más-Turbado es ni más ni menos que esa voz imparable, una compañera tan pegajosa que resulta en muchas ocasiones molesta, aunque tantas otras nos haya salvado y guiado a lo largo de nuestra vida azarosa.
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sábado, 12 de octubre de 2013
Es lo mesmo, diría Agapito...
Hace tiempo tenía un amigo de nombre peculiar, Agapito Mesobas, que para todo decía: "es lo meeeesmo".
Nos burlábamos de él por su indiferencia y timidez, pero años después entiendo la gran sabiduría de sus palabras.
Soñar o vivir, reír o llorar, la misma cosa todo, accidentes sin importancia.
Lo mismo da que se trate de La vida es sueño de Calderón de la Barca o Carlos Castaneda y Las enseñanzas de Don Juan... todo apunta hacia esto: no difiere mucho nuestra vida cotidiana de los sueños, de la muerte y otras realidades alternas.
En el universo sin forma ni principio ni final, ¿qué podría hacer la diferencia?
Nos burlábamos de él por su indiferencia y timidez, pero años después entiendo la gran sabiduría de sus palabras.
Soñar o vivir, reír o llorar, la misma cosa todo, accidentes sin importancia.
Lo mismo da que se trate de La vida es sueño de Calderón de la Barca o Carlos Castaneda y Las enseñanzas de Don Juan... todo apunta hacia esto: no difiere mucho nuestra vida cotidiana de los sueños, de la muerte y otras realidades alternas.
En el universo sin forma ni principio ni final, ¿qué podría hacer la diferencia?
miércoles, 2 de octubre de 2013
Pájaro enjaulado
"Los pájaros nacidos en jaula creen que volar es una enfermedad"
Alejandro Jodorowsky
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